viernes, 31 de mayo de 2013

Con el tiempo en contra...



No hay manera de detener el tiempo, no hay tampoco razón alguna por la cual yo quiera ser eterna y no despedirme de este mundo, el ciclo de la vida tiene una razón de ser y no voy a ser yo quien cuestione esto. Aún con el tiempo en contra no me detendré a mirar el reloj, la vida se me va segundo a segundo, a cada latido, en cada respiración y en un parpadeo habrá que decir adiós. Así que mes a mes vivo cada momento, he de saborear la vida como mi helado favorito, poco a poco, no muy rápido, no tan lento para que no se derrita en mis manos sin haberla aprovechado.
 

martes, 21 de mayo de 2013

Ser uno mismo

Nada se me ha regalado, cada uno de mis éxitos son el resultado de mi esfuerzo y las habilidades son adquiridas gracias a mi dedicación y tenacidad.
No hay premio sin haber sacrificado algo. No hay amor si no haz luchado por él. Vivir no sólo es respirar, es encontrar el motivo para hacerlo y luchar con todo mi ser hasta saber que todo mi entorno es como yo quiero que sea. Eso creo yo, es la felicidad.

domingo, 19 de mayo de 2013

Quiero volar...

Aunque tus cadenas me sigan manteniendo atada, no puedes seguir frenando mi vuelo.
Mira cómo cada una de mis acciones me están elevando.
No puedes detenerme. No puedo ni quiero regresar.
El aire de libertad que respiro, cada vez más, me incita a despegar.
Si, he retomado el vuelo. He vuelto a soñar mi libertad. He vuelto a la vida.
No me obliguen a bajar. Si me quieres, déjame volar.

lunes, 13 de mayo de 2013

No estoy triste

Si ves rodar una lágrima sobre mi rostro, no es de tristeza, es de alegría al pensarte.
Si no sonrío es porque estoy concentrada recordando tus besos y tus caricias.
Si tengo insomnio es porque no quiero cerrar los ojos y olvidarte mientras estoy durmiendo.
Si ya no salgo a ver a la luna no es porque me ponga triste, si no porque sé que tú la miras por mi.
Si no te busco es porque tengo miedo de no encontrarte y comprobar que realmente, no estar a tu lado, me pone triste.

viernes, 10 de mayo de 2013

No soy una madre normal...

Claro que no soy una madre normal cuando prohibo que mis hijos digan mentiras. Cuando les pido que guarden la basura en sus bolsillos hasta llegar a casa. Cuando les pido que devuelvan lo que se han encontrado, todo tiene dueño. Cuando les exijo respeto entre ellos. Cuando les he tenido que aplicar un correctivo y explicarles el porqué. Cuando doy mi vida por ellos. Cuando mi deseo es mantenerlos lejos del sufrimiento y los problemas.
Cuando mi propio cansancio y dolor desaparece al verlos sonreír.
Cuando les pido que busquen lo que les haga feliz.