martes, 30 de abril de 2013

A mi niño interno

Que Dios conserve tu alma con la pureza de un niño. Que rias cada día más y llores menos. Que vuelvas a ocuparte de los detalles pequeños de la vida y a preocuparte menos por los problemas de esta. Que tus ojos vean con más amor y tu lengua juzgue con menos rigidez. Que tu corazón vuelva a ser sencillo y que la rudeza se borre de tu rostro. Que la desesperanza, el enojo y la frustacion se borren de tu camino y se cubran de pisadas sin miedo que se dirijan al descubrimiento de tu "yo" sencillo y sin orgullos. El "yo" que quiere jugar, que quiere reír y que quiere vivir.
Que hoy seas más niño que ayer.

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